Encasillando: Bobo Pulpín

Bobo Pulpín, en un divertido personaje de sale del bar de tapas Cañota, es un pulpo de 6 patas que ha recorrido el mundo entero y nos trae las recetas más sabrosas que de el mismo hay por todo el mundo, así que podrás probar a parte del pulpo a la gallega, pulpo con kimchi y pepino, pulpo con bambú y salsa agridulce y otras especialidades super ricas todas.

Para quien no lo sepáis este restaurante es de los Hermanos Iglesias, así que aunque está en una de las zonas más turísticas de la ciudad no os de miedo entrar, porque vais a comer de lujo, buena calidad, buena cantidad y trato excelente.

El restaurante nos encantó, amplio, acogedor y pensado para familias, ahora os cuento.

Nosotros como siempre con nuestro niño a todas partes, así que nos ubicaron en el salón interior para estar más cómodos, rápidamente dieron la vuelta al mantel individual donde habían dibujos para colorear y nos trajeron un montón de colores, a mas a mas teníamos la tele delante con un simil de pecera y para redondear el tema teníamos una estatua de Bobo Pulpín gigante al lado nuestro, así que teníamos al peque encantadisimo.

Ahhh, se me olvidaba, nos dejamos en casa el asiento del niño, pero no hubo ningún problema nos sacaron un asiento la mar de apañao que se ajustaba a la silla perfectamente, así que todo más que ideal.

Una vez ubicados, con el mantel para colorear, la tele puesta y mi niño sentado comenzamos con el festín. Una tortilla de patatas con chorizo y alioli que estaba riquisima, super jugosa.

Continuamos con La cajita de fritos, que traía un poquito de todo, calamares, gambas, pulpitos, pescadito, en fin, estaba de muerte, hasta la cabeza de las gambas nos comimos, solo os digo eso.

Turno de las alitas de pollo de corral embarradas con salsa de chile chipotle, aix, si sois amantes del picante os encantará, porque pican, pican, y me encanta, por fin un sitio que te dice que pica y pica. Que rico madre mía, y el pollo más meloso ya no podía estar.

Pulpo no podía faltar, así que nos decidimos a probar el Mole de olla con pulpo y costilla, te lo traían con unas tortitas y la idea era comerlo como si fuera una fajita, estaba riquisimo.