viernes, 6 de mayo de 2016

La Mundana

La Mundana, la primera vez que hoy hablar de ella, fue a través de una amiga que propuso noche de chicas y yo no pude ir. Así que cuando volví a verla, me comento lo bien que cenaron y lo rico que estaba todo, así que no deje pasar más tiempo y aquel mismo día nos decidimos a ir. Había quedado para comer y nos quedaba cerca de donde estábamos, así que con un poco de suerte igual encontrábamos mesa y todo.

Ellos mismos ponen en su puerta Vermutería Gastronómica, aunque no es un lugar de vermut al uso, es más bien, un restaurante de los que se llevan ahora de platillos para compartir, muy bien elaborados eso si.

El lugar es bastante mono, pequeñito pero muy cuco, una barra a la entrada que se amplia al final donde se ubica el comedor y lo mejor de todo por lo menos para mi, es que hay una minúscula terraza que alberga un par de mesitas, ideal para una noche romántica, aunque me imagino que van bastante buscadas, sobre todo ahora con el buen tiempo.




Fuimos entre semana, y fuimos a la carta ya que no disponen de menú de diario.

Comenzamos con un pan de puntas con mantequilla ahumada, para ir haciendo tiempo mientras llegaban el resto de platillos que habíamos pedido.


Y comenzamos el festival señores, calamares a la andaluza con mayonesa de estragón i salsa romesco. Un plato sencillo, donde se puede ver y valorar la ganas que tiene este equipo de hacer las cosas bien, ya que en cuanto a sabor y presentación tiene un plus.


Continuamos con el ravioli vegetal de calabacín i berenjena, con escalivada, ricotta i salsa Arrabiata. Esto iba "in crecendo", estaba delicioso, riquisimo y no se como más calificarlo. Super rico.


Turno del briox relleno de Chile con carne i yema de huevo. Muy rico también, a demás el briox le aportaba un toque dulce muy interesante.


Y finalizamos con un curry thai de gamba con pescado del día, el plato estaba muy rico, pero para ser el plato más caro que habíamos pedido esperaba más en cuanto a cantidad se refiere, habían cuatro fideos contados en el plato, no se, pero estamos en lo mismo de siempre ¿tanto cuesta echar un poco más de fideos? 


De postre un Baba al Ron a la Brasa, que aunque estaba rico, no tenía la ligereza que esperaba, era un tanto mazacote y muy muy muy emborrachado de ron.


En general en cuanto a cocina se refiere, bastante bien, aunque a mejorar algunos puntos, por lo que ser refiere al personal de sala, personalmente no me gusto demasiado, no es que estuviéramos desatendidos, pero no daban el plus que esperaba. En fin, no me dieron la sensación de tener mucha experiencia y eso se notaba.

Encasillando
Vermutería gastronómica.

Precio medio por persona: 30 euros

Vallespir, 93

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