lunes, 25 de marzo de 2013

Inaugurando la Primavera

Sábado por la mañana, y habíamos quedado a las 12:30 hr en la puerta del Ayuntamiento con unos amigos. No sabíamos donde íbamos, ya que mi marido nos había preparado una ruta sorpresa por Barcelona, y nos tenia muy intrigados.

Así que comenzamos la ruta, y el primer sitio que nos llevo fue al Hotel Mercer, dentro del Hotel tienen una pequeña bodega donde hacer el aperitivo y tomar una tapas.  Pero como llegamos un minuto antes de que abriera la bodega, aprovechamos para cotillear.


Finalmente entramos en la bodega, era chiquitita pero muy acogedora, la pared estaba perfectamente decorada con jamones y embutidos de la tan preciada marca Joselito.


Así que comenzamos con unos vermuts para ir entrando en situación. El día prometía, y casi no habíamos desayunado.


Acompañamos los vermuts con una tapa de olivas y un surtido de embutidos que estaba realmente rico.




El Vermut Mercerino
Calle dels Lledó 7, BCN

Y nos dirigimos hacía la Barceloneta donde la parada siguiente iba a ser el Vaso de Oro, a tomar una de sus preciadas cañas, y es que dicen que son de las mejores de la ciudad. Aunque para mi gusto un poco caro 4 cañas y una tapa de queso, 20 eurazos.




Para quien no lo conozca, os diré que es una cervecería que está al principio del barrio de la Barceloneta, es un largo local que hace esquina, con varias puertas de acceso que dan directamente a la barra la cual es la gran protagonista y ocupa casi la totalidad del espacio, lo que provoca grandes aglomeraciones destilando un ambiente muy especial.





El Vaso de Oro
Calle de Balboa, 6, BCN


Ya íbamos un poco contentos y continuamos la ruta, hacía el Villoro, uno de esos bares auténticos de toda la vida de la Barceloneta, al final del Paseo Borbón. 


Parece mentira que con las veces que habíamos pasado por delante, nunca nos habíamos percatado de su presencia, y es que es un sitio que no llama la atención en un primer momento, pero si decidís ir, no os defraudará.


Así que con nuestras cañas en la mano, comenzamos pidiendo unas tallarinas, unos mejillones al vapor y lacón.




La mesa que teníamos al lado, terminó siendo nuestra inspiración para el siguiente plato  ya que les trajeron unos buñuelos de bacalao que no pudimos resistirnos, así que sin ningún rubor pedimos también nuestra tapa para probarlos.

Nos quedamos con las ganas de probar uno de sus arroces, pero como la ruta ya estaba establecida nos los reservamos para otra ocasión.


Aquí con nuestro amigo Manolo, que nos atendió de miedo, simpático y profesional como el solo. Si vas, déjate aconsejar por él. 


Bar Villoro
Passeig de Joan de Borbó, 72, BCN


El plato fuerte lo íbamos a hacer en el Restaurant 7 Portes, un clásico entre los clásicos y que por una cosa o por otra, aun no habíamos ido ninguno de los que estábamos.




La paella iba a ser el plato estrella, pero mientras esperábamos, decidimos pedir una croquetas para picotear.


T-chaaaaaan, la paella, buena pinta ¿no?


Pues sabe mejor.


Finalmente con la dolorosa, y nunca mejor dicho, ahora entiendo porque aun no habíamos ido hasta la fecha, me resulto realmente caro. 
Por una paella, unas croquetas y dos botellas de vino, pagamos 40 euros por barba. No se, me pareció algo exagerado, eso sí nos sentamos en la mesa donde había comido  Marcelo Mastroiani, o por lo menos eso ponía el cartel.


Restaurant 7 Portes
 Paseo Isabel II, BCN



  Y llegó el turno del postre, que por supuesto lo íbamos a hacer en otro sitio.


El Caelum es una de mis cafeterías preferidas, tienen dulces que provienen de diferentes monasterios, realizados de manera artesanal. Y está ubicado en un local de corte medieval realmente encantador.




Nos pedimos tres tartas diferentes para degustar, a cual mejor.



Caelum
 Calle Palla, 8, BCN

Y hasta aquí os puedo contar.

Encasillando:  Todo en un día.

El Vermut Mercerino: vermut glamouroso.
Vaso de Oro: cervezas de calidad
Villoro: un veterano de barrio que sorprende.
7 Portes: un clasicazo que no defrauda, aunque lo acabas pagando
Caelum: dulces caprichos en un ambiente espiritual




lunes, 18 de marzo de 2013

Lost & Found + Rest. Negro Carbón

Era domingo, y era no se que edición del Lost & Found, mercadillo de segunda mano, donde puedes encontrar ropa, música, libros y demás.

Habíamos quedado para ir a comer algo y luego ha chafardear, haber si encontrábamos alguna ganga.

Así que nos fuimos al Negro Carbón en Pla de Palau, 16 BCN, un restaurante informal argentino con muy buen ambiente. El restaurante tenia una buena selección de carnes argentinas que tenían muy buena pinta, pero nos terminamos decantando por unas hamburguesas que estaban realmente muy ricas.








La Llorona, que se suponía que picaba pero apenas se notaba.


Una clásica, con su queso, su lechuga y su tomate.


Y unas patatas bravas de acompañamiento.
Precio Medio: 17 euros x persona.



Y ya con la barriga llena, estábamos preparados para visitar el mercadillo.


Realmente nos sorprendió, por la cantidad de gente que allí había. 

Una vez dentro, había un montón de puestecitos con infinidad de productos diferentes, desde ropa, zapatos, bolsos, gafas de sol, monturas, discos, cámaras de fotos, bicis, muebles, ... hasta una pequeña peluquería había allí dentro. Pero lo más sorprendente es que, entre todo este guirigay se mezclaban los pasajeros que salían o llegaban a la estación, "madre mía que marcha hay en Barcelona" han debido pensar, y es que además había un musicón de cuidado, en una de las esquinas había ubicado un DJ con buena música que te hacia ir bailoteando casi sin querer, mientras paseabas por los diferentes puestecitos.


Maletas llenas de ropa vintage.


Pendientes de todas las medidas y colores.


Hasta estas calaveras tan divertidas.


Cestas de picnic llenas de libros y peluches.


Y una buena selección de zapatos.

Una buena manera de pasar una tarde de domingo.






lunes, 11 de marzo de 2013

Restaurante "Canete"

Y acabamos comiendo en el "Cañete".

El día de antes habíamos estado cotilleando algunas webs para ver donde íbamos a comer al día siguiente y aunque no lo teníamos claro, la web del Cañete ya nos atrapó por su historia inacabada.

Y finalmente allí que nos fuimos, y es que por fuera tenia una pinta de esas que convencen.






Solo entrar, había una larga barra así que comenzamos a atravesarla para ir al comedor, pero nos dijeron que si eramos dos debíamos comer en la barra y aunque no terminamos de entenderlo muy bien, obedientemente nos terminamos sentado. Tengo que decir que no nos importo en absoluto, ya que nos encanta en ambientillo que suele haber detrás de las barras: ves como trabajan los cocineros y ves los entresijos que se llevan entre ellos, además de poder captar la profesionalidad que en este caso la había. 


Así que una vez ya ubicados y bien sentados, comenzamos a pedir, lo que seria nuestra comida. Todo tenía muy buena pinta, tienen una de esas cartas en las que te apetece probar de todo, pero como no puede ser nos decantamos por tortilla de alcachofa con panceta ibérica, jugosa, buenísima, como nos gusta.


Pedimos también una ración de ensaladilla rusa, como podéis ver mi marido ataco antes de dejarme hacer la foto.


Sugerencia del camarero: pulpitos con alcachofas, uff increíbles, tengo que decir  que de los mejores pulpitos que hemos probado nunca. Y la alcachofa espectacular, se notaba que era época.


Terminamos con vaca vieja con foie al estilo Rossini. 


También pedimos mollete de cochinillo y de postre un cheesecake de mató, aunque ya me olvidé de hacerles fotos. Todo estaba espectacular.


Tengo que deciros que la comida hizo que olvidáramos de la cantidad de preguntas que teníamos en torno a la historia del Cañete ¿qué fue del Manolo y la Mary? ¿Y el nene del Manolo, aún tiene el bar en la Verneda? ¿y el resto de sus hijos también se dedican a la hostelería? en fin, creo que tendremos que volver para dar respuesta a todas nuestras preguntas.

Si entráis en la web entenderéis mis preguntas  http://barcanete.com/

Encasillando:
Comida en barra,  como los de antes pero actualizado.

Precio medio: 40 euros/persona


Bar Cañete
Carrer de la Unió, 17
08001 BARCELONA


lunes, 4 de marzo de 2013

Els Sortidors del Parlament

Els Sortidors del Parlament, si no lo conocéis debéis ir ya mismo, corriendo, sin perder comba, ja,ja,  y es que es uno de mis sitios preferidos para ir a hacer un buen vermut.

Sábado por la mañana, y tenia planazo, de vermut con mi amigo Angel que hacía unos días que no coincidíamos y nos teníamos que poner al tanto de tooooodas las novedades más novedosas.

Como la zona de la calle Parlamento nos encanta y encima han abierto un montón de sitios super chulos, nos pareció la calle ideal para picar algo, y nos fuimos para Els Sortidors, una bodega con muchísimo encanto, en donde puedes llevarte también vino a granel, cerveza, vermut (como no), y un sinfín más de cosas. Pero nosotros nos íbamos a quedar allí mismo charlando y saboreando algunas de sus tapas.


Así que comenzamos con un par de vermuts. Haber como acabaríamos!!!

 
Las tapas: pedimos surtido de quesos, riquisisisisimo, no tengo palabras, me encanta el queso a mas no poder tengo que confesarme, lo acompañaron con una mermelada de cebolla que estaba deliciosa. Como veis también unas olivas surtidas y bien aliñadas, un cuenco generoso os lo aseguro.


Habíamos pedido también unas anchoas, pero como veis cuando quise hacer la foto, ya nos las habíamos jalado, y pan torradito con su tomatito y su buen aceite.


Con la cámara de Angel hicimos fotos panorámicas chulísimas, así que podéis ver el interior de la bodega 360º.


Mención especial a los camareros, profesionales de los pies a la cabeza, sabiendo perfectamente como tratar al personal.Personalmente me encanta que se involucren con la clientela e intenten en todo momento hacerte sentir cómodo y como en casa, pero sin ser pesados, ya me entendéis. Pues reto conseguido, nos encantaron.

Encasillando:
Bodega con encanto ideal para ir a tomar un vermut con amigos.


Els Sortidors del Parlament
Calle Parlament, 51
Barcelona