Hacía casi un año que no nos íbamos a comer mi marido y yo solos, nos cuesta muchiiiiiisimo dejar a nuestro retoño, pero el viernes decidió pasar el día con sus abuelos, así que aprovechamos para salir a comer y descubrir algún sitio nuevo. Mi marido justo venía del eixample antes de pasar a recogerme y vió un par de sitios donde ir.
Así que nos presentamos en la puerta de El Gat Blau, que estaba hasta los topes y con cola, así que pensamos "madre mía, aquí nos va a tocar 30 min. de espera por lo menos" pero para nuestra sorpresa el local es bastante más grande de lo que parece y nos cogieron en 5 escasos minutos, nos ubicaron en una mesa grande al lado de la cocina que compartimos con otros comensales.
El Gat Blau, se identifica como cocina sostenible y saludable, con productos ecológicos y de cercanía, así que aquí no encontrarás ni fritos ni precocinados, todas la elaboraciones las hacen ellos (me encanta).
Para el mediodía tienen una fórmula eco por 11,90 €/pax, que está la mar de bien, con algún plato con suplemento pero nada exagerado.
De primeros pedimos una pasta con verduras y un timbal de berenjena, todo sencillo pero rico, con sabor y platos bastante generosos, que la verdad se agradece.
De segundos nos trajeron costilla de cerdo y bonito con verduritas, estaba todo delicioso, la costilla de cerdo estaba tremendamente tierna y sabrosa y el bonito estaba cocinado en su punto justo para que no quedará seco.
Y para terminar un pastel de limón y un yogurt con miel.
Nos pareció gracioso que en sus manteles y carta, aparece el símbolo de cocina "slow food", pero os puedo asegurar que van a buen ritmo, no como otros rest. que lo cogen como excusa para ir más lentos.
Encasillando
Una buena opción si te gusta la cocina sencilla pero con sabor.
Rest. Gat Blau
Comte Borrell 122